“No te muevas”, de Margaret
Mazzantini.
Una adolescente de quince años
sufre un accidente de ciclomotor. La ausencia del casco provoca que los daños
sean graves… Es trasladada a la sala de Urgencias del hospital más cercano, en
el que se encuentra Timoteo, el padre de
la víctima, dado que ejerce como cirujano en el mismo.
Al tener conocimiento de la
tragedia, Timoteo comienza un monólogo, dirigiéndose a la paciente, en el que
desgrana los claroscuros más destacados de su existencia, pintando una cara extraña
de sí mismo, desvelando actos cometidos
por él que le atormentan, y recordando una pasión que le acompaña desde antes
del nacimiento de Angela, su hija: Italia.
Italia vive en una barriada
marginal; es una mujer humilde, resignada, sumisa, casi desamparada, opuesta al
mundo de Timoteo, a la que conoció de casualidad y que, desde el momento en que
la vió, cambió su vida para siempre. El cirujano de éxito, casado con una
periodista de renombre, con una existencia tranquila, da paso a un hombre
desorientado, confuso, alejado de la vida burguesa que estaba destinado a vivir,
y haciéndolo capaz de actuar de manera despreciable o impredecible…
El monólogo va dirigido a su
hija, pero también a sí mismo… Le sirve de confesión, de búsqueda de la verdad,
de desahogo. Le sirve para rememorar lo que para él fue la felicidad, el amor, y
refleja su desmoronamiento como persona ante la posible pérdida de lo más
importante de su vida.
Si tengo que poner un adjetivo a
este libro sería el de DESGARRADOR.
La escritora nos mete a empujones
en la historia, a golpes, y a golpes nos vamos enterando de los detalles. En mi
caso, en la página 7 me dí cuenta de que era un libro de los que difícilmente
se olvidan. Mazzantini despliega una prosa con personalidad, con estilo reconocible,
productiva y efectiva.
No tiene piedad con el lector ni
con el personaje, llevándonos en un viaje en el que dolor, pasión, engaño,
felicidad e incertidumbre conviven mientras sufrimos por la situación de
Angela.
Con ritmo ágil, rápido de leer,
aunque también es cierto que
aproximadamente hacia la mitad del libro se vuelve algo confuso y nos hace dudar
de la lectura, dudas que la escritora nos disipa con unos capítulos finales
magníficos.
Cosechó un tremendo éxito en
Italia, (se rodó una película homónima, con Penélope Cruz como una de las
protagonistas), y perduró en la lista de los libros más vendidos durante más de
dos años. Evidentemente, no todos los lectores quedarán satisfechos con la
lectura, pero yo recomiendo a los que lo intenten que se hagan con una buena
provisión de kleenex…