viernes, 15 de septiembre de 2023

"Cluny Brown", de Margery Sharp

Andrew Porrit es un serio y responsable fontanero al que no le va nada mal en su labor, con un creciente número de clientes que confían en su trabajo en el Londres previo a la Segunda Guerra Mundial. Hombre de gustos y costumbres sencillas, además de persona con un sentido de la responsabilidad extraordinario, convive desde hace años con su sobrina: Cluny Brown. 

Tal vez Cluny sea el elemento desestabilizador de la vida de Andrew. A pesar de que la quiere como si fuese su propia hija, la extravagante joven tiene al fontanero al borde del colapso. Su actitud poco convencional, capaz de gastarse un dineral para darse el place de tomarse un té en el hotel Ritz o de acudir a una llamada urgente de un cliente del fontanero convirtiendo su bienintencionada asistencia en una especie de precipicio, hacen que Andrew tome una determinación: ha de "meter en cintura" a la adolescente.


Para ello decide aceptar una oferta de trabajo que la llevará lejos de la gran ciudad, y supone y espera que cambie su actitud. Se trata de un puesto de asistenta en Friars Carmel, una mansión venida a menos en la campestre Devonshire. Ahí, además de aprender (a duras penas) un oficio, Cluny ha de relacionarse con sus compañeros y superiores en el trabajo, con los habitantes y visitantes de la mansión, y los vecinos cercanos. 


Como es un libro de Margery Sharp y no es el primero que leo de ella, supuse que el tono sería desenfadado y divertido, y no me equivoqué. Cluny es una caricatura en sí misma, siempre fuera de lugar (o tal vez su lugar sea estar fuera de juego), y capaz de dejar boquiabierto a cualquiera. La trama se va enredando entre señores y sirvientes, entre amoríos y desamores, y nos va dibujando una sonrisa en la boca. Creo que es una lectura ligera perfecta para esas épocas de vacaciones o en esos inquietantes períodos en los que se nos atraviesan varias lecturas y parece que perdemos el ritmo. Desintoxicante.