lunes, 23 de mayo de 2016

"Johnny cogió su fusil", de Dalton Trumbo

“Johnny coge tu fusil” ("Johnny get your gun") era un lema utilizado a finales del Siglo XIX y principios de XX para animar a los jóvenes estadounidenses a unirse a su pujante ejército y ayudar a su país en los conflictos bélicos en los que se veía involucrado. Además, una canción popularizada por George M. Cohan (“Over there”)  el año en el que dicho país se involucró en la Primera Guerra Mundial terminó por convertir ese lema en muy reconocible.

El polifacético novelista, periodista, reputado y exitoso guionista cinematográfico (que escribió guiones de películas tan variopintas como “Espartaco”, la “Vacaciones en Roma” de la inolvidable Audrey o “Papillón” e incluso ganó dos Oscar por dicha labor) y director de cine estadounidense Dalton Trumbo se valió de esa frase para moldearla y transformarla y con ello poner título a la novela más importante e impactante que escribió: “Johnny cogió su fusil” ("Johnny got his gun").

Tras la publicación en el año 1939 de este controvertido libro, (unos días antes del comienzo de la Segunda Guerra Mundial), Trumbo se convirtió por un lado en símbolo de movimientos antibelicistas y pacifistas y por otro en objetivo de las esferas más conservadoras de su país, pasando a ser una figura perseguida por la caza de brujas iniciada por el senador McCarthy. Eso le costó a Dalton Trumbo una estancia en prisión de once meses, y el exilio al país vecino, Méjico, desde donde siguió desarrollando su talento siendo necesario para ello el utilizar varios pseudónimos o incluso servirse de la ayuda de algunos amigos que daban la cara por él como supuestos autores de sus trabajos .

Además, el libro se convirtió en una lectura recurrente desde entonces en diversos conflictos bélicos, teniendo más repercusión que nunca durante la Guerra de Vietnam. El propio autor escribió el guión (inicialmente para que dirigiese la película el aragonés Luis Buñuel) y dirigió la adaptación cinematográfica de esta historia. También consiguió un repunte en cuanto a su popularidad en los años 80, ya que en este libro se basó una de las canciones más reconocibles de la exitosa banda musical Metallica: "One".

El argumento es bien sencillo: Joe Bonham (estoy seguro de que todo lector de este libro recordará para siempre este nombre) yace en una cama de un hospital indeterminado en un país indeterminado tras haber sido herido en una batalla durante la Primera Guerra Mundial. Debido a una franca incapacidad para comunicarse, Joe nos narrará las sensaciones que vive en esa cama, así como los hechos más relevantes de su pasado, que acuden a su mente de la mano de sensaciones actuales. Para desarrollar este argumento, Dalton Trumbo se basó en varios casos reales de heridos en la Primera Guerra Mundial, y para los recuerdos de Joe Bonham en las vivencias pasadas por él mismo en su juventud.


De un modo en (muchas) ocasiones claustrofóbico y asfixiante, secundado por una llamativa y deliberada falta de puntuación en el texto que pretende dejarnos (con evidente éxito) sin respiración, sufriremos con Joe y  sentiremos dolor, rabia e impotencia tal y como la sufre él. Nos plantearemos cuestiones que tal vez nos hayamos planteado en algún momento de nuestra vida, pero estoy seguro de que la mayoría de nosotros no se ha hecho esas preguntas de la contundente forma en la que Trumbo hace que exploten ante nosotros.

Es un libro duro. Durísimo. Es un libro difícil de digerir. Es  un libro conmovedor. Es un libro que no da concesiones al lector. Es un libro para beber en pequeños sorbos. Es un libro que te sorprende leyendo con los puños en tensión. Es un libro cruel.


Después de leer estas líneas te estarás preguntando: ¿qué me puede llevar a leer este libro? Mi respuesta es sencilla: es un libro que has de leer. Es un libro que no te puedes perder. Es un libro que te agarra por el pecho y te zarandea. Es un libro que te hace pensar. Es un libro que no olvidarás. Es un libro que cambiará tu punto de vista. Es un libro que hará que no seas la persona que eras antes de comenzar su lectura. Como en muchos momentos de la vida, las enseñanzas más valiosas las obtenemos de momentos complicados: “Johnny cogió su fusil” es un ejemplo perfecto de ello.